Esta expresión tenemos que hablar, después de la ruptura. A veces tiene muy poco sentido. Nos sujeta a ciclos de complicación, que poco aportan a nuestro bienestar emocional.
Llega un momento en el que hay que decir adiós Sofía, pasaba hora enteras, esperando un mensaje, hasta que el sueño la vencía, hasta que su fuerza no le sostenía, su insomnio la agotaba, entre…