Rafael Ramos Esta hermosa frase, a veces cuesta entenderla, porque todos deseamos vivir nuestros procesos con una introducción, un desarrollo y una conclusión.
Pero, cuando no sabemos, ni siquiera cómo será el siguiente capítulo, o peor aún la siguiente página, o el siguiente párrafo, de nuestra historia, esto de un día a la vez puede volverse complicado,
A veces queremos saberlo todo
Comprenderlo todo, resolverlo todo y la vida es de procesos. Algunos están en nuestras manos, los podemos controlar, pero la gran mayoría, sólo vienen y van. Nos toca adaptarnos con flexibilidad, que difícil esto de un día a la vez, cuando tenemos grandes expectativas, corremos mucho, ponemos mucha energía, se avanza poco, mientras sentimos que ya no podemos más.
Recuerdo una persona que una vez me decía “he aprendido a no estresarme”. M me ponía este ejemplo “si tengo una cita a las 4, y son las 3, no me preocupo, falta una hora, pero si son las 4:30, no me preocupo, ya no llegue, entonces llamo y busco una solución”.
Claro, no todo en la vida es tan sencillo como esto
Pero cuando te das cuenta que estás dando lo mejor de vos, que estás actuando conscientemente haciendo un esfuerzo, por el fan de cada día, poniendo todo tu empeño, dedicación, amando cada una de las cosas que haces, y los resultados a veces no son los deseados, no te abrumes.
El éxito, a veces no es la meta final
Esta llegará, el éxito, es saber sostenerse y mantenerse en momentos en los que la nnoche se hace eterna y el amanecer parece que no va a llegar.
Un día a la vez, no es vivir sin visión de futuro, es vivir con plena conciencia nuestro presente. Es dejar de arrastrar el pasado, dejar de hacernos daño por la culpa.
Es concentrarse en lo que podemos administrar
desde ahí podemos soñar, pero comprendiendo que el éxito en la vida, no son las grandes metas, si no en el poder sostenernos solo en aquellos caminos que nos dan paz, a la vez tener la capacidad cambiar los caminos, cuando estos no nos llevan a ningún lado.
Un día a la vez:
- Trabajando con consciencia.
- Dando lo mejor
- Haciendo lo mejor.
- Abiertos a la esperanza.
- Comprometidos con la tenacidad.
- Expresando nuestras emociones.
- Sostenidos por la gratitud.
De esto se tratan estos tiempos, de amar la vida, la historia que nos toca enfrentar, no es dejar de soñar, es trabajar mucho, aun cuando todo este en contra, que los buenos tiempos, siempre vuelven.
Dr. Rafael Ramos.
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Columna Ramos de Apoyo, tomado del Periódico la Teja.
