Ser una niña exploradora no es cosa de edad sino de actitud. Y así lo demuestra Venorica “Ronnie” Backenstoe, una mujer que ha sus 98 años sigue vendiendo galletas para las “girl scouts” de su comunidad.
La mujer de la tropa 1814 de Pensilvania, todavía usa su uniforme oficial y vende sus galletas en la casa de retiro donde vive, ya que es su principal experiencia de vida.
El sueño de Ronnie de ser exploradora empezó desde niña pero su madre la hizo esperar hasta los 10 años, así fue como en 1932 su vida comenzó a girar entorno a las galletas. Su crecimiento en la tropa fue inmediato y se convirtió en una de las líderes de su región, logrando viajar a Suiza y Jamaica.
Gracias a su labor como scout su relación sobrevivió a la guerra. Cuando su esposa se fue a pelear a la Segunda Guerra Mundial, ella le dio su anillo de exploradora y lo pegó en su placa. Le dijo que regresaría a salvo y así fue.
Parece imposible no amar la actitud de Venorica “Ronnie” Backenstoe, tiene la misma actitud de una niña exploradora pese a todo la experiencia que le ha dado la vida.
WE LOVE THIS ♥ Ronnie Backenstoe has been a Girl Scout since 1932! https://t.co/I2uXm8F8c4
— Eyewitness News WTVO/WQRF (@MyStateline) February 13, 2020